pieles

Esa entidad que me mueve, ahorita mucho, a veces como si siempre hubiera estado, y hasta llega a ser indiferente, bueno no o no tanto porque siempre huele. Mientras más quieta estoy más se revuelve, picándome el paladar, con ganas de mañana, de al ratito, de ya de ya.
Planes de aperitivo, no hay plato principal. Por cierto, estoy viviendo a lo golondrina planeadora -de todo menos de mí (si no, qué aburrida)-, o lo soy, o no.
Diminuta y enorme, cera morada, maltratada, lucha contra la melanina, hada, refresco, animal... mis alter ego.
Y yo en esta pecera sin darnos cuenta de mi ebullición.
Pieles.


Epílogo.
Más allá de mi lejanía siempre he querido que hagan algo maravilloso de mí. Gracias a quienes lo hacen para alguien más porque me hacen pensar que tarde que temprano llega mi turno.